• La formación naranja preguntará también por el polígono de Ses Veles de Bunyola y las actuaciones que necesita la carretera Ma-4020 Manacor-Porto Cristo para reducir la siniestralidad.

Palma, miércoles 11 de noviembre de 2020. El grupo Ciudadanos (Cs) en el Consell de Mallorca interpelará en el pleno de mañana jueves por los 12 proyectos que el Ayuntamiento de Sant Llorenç reclama a la institución insular para evitar daños en el caso de que se produjera una nueva riada como la sucedida en 2018.

La portavoz de Cs en el Consell de Mallorca, Beatriz Camiña, ha explicado que “en Ciudadanos queremos saber si el Departamento de Movilidad e Infraestructuras tiene previsto actuar en Sant Llorenç para que tragedias como la que se vivió hace dos años no puedan volver a producirse”.

Asimismo, según ha explicado Camiña, el grupo preguntará también al Conseller de Movilidad e Infraestructuras sobre “qué tiene previsto hacer para reducir las listas de espera en la ITV ahora que el Gobierno central no ha atendido su petición de prorrogar la vigencia de esta inspección, porque no pueden seguir los retrasos actuales, que tienen un efecto negativo para todos los conductores y especialmente nefasto para los transportistas”.

La formación naranja preguntará también por “qué intención tiene el Consell respecto a la petición del Ayuntamiento de Bunyola de ayuda para afrontar el mantenimiento del polígono de Ses Veles, en el que los residuos campan a sus anchas desde hace años”.

Finalmente, Beatriz Camiña ha señalado que Ciudadanos presentará también dos mociones, “una para pedir que se lleven a cabo las actuaciones necesarias en la carretera Ma-4020, de Manacor a Porto Cristo, para reducir la siniestralidad que registra cada año”, y la otra para solicitar “la adhesión del Consell a la declaración ‘Kids Save Lives’, elaborada por varias organizaciones internacionales y respaldada por la OMS, que supondría también poner en marcha un programa de formación en reanimación cardiopulmonar (RCP) orientado a niños a partir de 12 años para poder dar una mejor respuesta como sociedad a las paradas cardiorrespiratorias que cada año se cobran la vida en España de unas 25.000 personas”.